Hotel Transilvania
Año 1895: El Conde Drácula es todo un padrazo que cuida y mima a Mavis, su pequeña hijita. Mientras ella va creciendo, Drácula va supervisando las obras de un gran hotel para albergar a sus monstruosos amigos en sus vacaciones, y alejarlos al mismo tiempo de los malditos y terribles humanos. El famoso Conde llamará a ese hotel: el ‘Hotel Transilvania’. (Cineycine).
¿Qué pasaría si el Conde Drácula decidiera abrir un Hotel para que los monstruos más míticos del cine fueran allí a pasar sus vacaciones? Sería curioso de ver ¿verdad? Bien, pues la respuesta la tenemos ya mismo en… ‘Hotel Transilvania’.
“Crea tú propio paraíso y ¡Bienvenidos al Hotel Transilvania!” (Conde Drácula)
Crítica de Hotel Transilvania
He de comenzar diciendo que, pese a ser un gran admirador del trabajo de Genndy Tartakovsky (al que conocí por su absolutamente genial serie de ‘Samurai Jack’), la verdad es que me acerqué con mucho «miedo» a esta cinta de animación. A priori, no me hacía mucha gracia la idea de ver caricaturizados a monstruos míticos del cine como Drácula, el Hombre Lobo, Frankenstein,… Y meterlos a todos juntos en un hotel a pasar unas vacaciones con gracietas para niños.
Sin embargo, y honestamente, tengo que reconocer que entré de lleno en la diversión de ‘Hotel Transilvania’. Una vez iniciado el visionado, acepté la propuesta de humor que Tartakovsky nos ofrece. A pesar de que el film básicamente cuenta una historia que ya nos suena, la verdad es que el guión es muy divertido y contiene ciertos toques emocionales muy acertados. Un ejemplo de esto último es la historia del pasado de Drácula… Además, la propuesta cuenta con algún que otro genial y directo guiño cinematográfico. Y ¡claro! los más pequeños de la casa creo que lo pasarán pipa con las simpáticas animaciones, bromas y expresiones que Tartakovsky y sus animadores les sacan a los más míticos monstruos del cine.
Hablando de los animadores, y del diseño de los personajes, toca hacer aquí un poco de patria destacando la labor del español Carlos Grangel. Nuestro compatriota participó en el diseño de las divertidas caricaturas de los monstruos. El sistema de trabajo de Carlos es muy peculiar: plasma sus diseños en la parte posterior de las cajas de cereales. Ese color le sirve de inspiración y, además, si el diseño no le gusta no pasa nada por tirarlo porque de todas maneras las cajas de cereales se rompen y se tiran a la basura. Carlos diseñó entre otros personajes a Murray, La Momia.
Recalcar que resulta muy divertido ver en pantalla las geniales y divertidísimas recreaciones/caricaturas animadas de monstruos aterradores como La Momia, el Hombre Lobo o Frankenstein. A esto hay que sumar los divertidísimos diseños de otros monstruos secundarios que pululan por el hotel. A esta legión de seres de las tinieblas no los mencionaré para que el público disfrute descubriéndolos. En este sentido, el visionado de ‘Hotel Transilvania’ se convierte para el espectador adulto y fan del terror en todo un juego. Un juego en el que ir detectando a los muy variados monstruos cinematográficos que están hospedados. Y ojo al dato porque el Hotel Transilvania tiene 1250 habitaciones (950 para clientes).
Teniendo en cuenta lo que acabo de exponer, la animación del film resulta muy simpática y caricaturesca. Sobresale especialmente en las expresiones faciales de los protagonistas. También destaca por estar repleta de diferentes colores que llaman la atención del espectador. Y, finalmente, tenemos momentos realmente brillantes de la propia animación, como el ya comentado en párrafos anteriores y que hace referencia al pasado de Drácula. Un Drácula que, en determinadas poses y movimientos, me recordó a Aku, el poderoso y principal enemigo de Samurai Jack.
Quisiera comentar también el trabajo de doblaje realizado por Santiago Segura (Drácula), Clara Lago (Mavis), Dani Martínez (Jonathan), Alaska y Mario Vaquerizo (Señora y Señor Frankenstein). A este doblaje le tenía “más miedo” que a la propia película en sí. Pensé que iba a resultar desastroso… pero nada más lejos de la realidad. El trabajo de doblaje realizado es francamente bueno y quedé encantado con todos ellos. Por mi parte, ni una pega en este sentido, más bien todo lo contrario.
Por otro lado, en la banda sonora podemos escuchar, en los divertidos títulos de crédito finales, el pegadizo tema principal “The Monster Remix” interpretado por la artista Becky G con la colaboración de Will I Am. Respecto a las 3-D tengo que decir que las mismas sólo son aprovechadas para dotar a los fondos de de cierta profundidad. Más allá de esto, apenas hay solo uno o dos efectos que impliquen al espectador. Por consiguiente, creo que la película puede ser disfrutada de igual manera en las dos dimensiones de toda la vida.
En el guión destacan los nombres de Peter Baynham y Robert Smigel. Ambos trabajaron sobre una historia escrita por Todd Dirham, Dan Hageman y Kevin Hageman. Tras presentar los orígenes del hotel, los guionistas nos sitúan en la actualidad. Concretamente en el cumpleaños de mayoría de edad de Mavis (118 años). A partir de ahí introducen un elemento extraño en el hotel (un mochilero humano llamado Jonathan) que dará lugar a un gran número de situaciones caóticas con Drácula tratando de ocultarlo y Mavis enamorándose del mismo. En consecuencia, nada saldrá como Drácula había previsto inicialmente…
“¡Hola! ¿Hay alguien ahí?”… Hotel, dulce hotel.
Conozcamos ahora, brevemente, al dueño y a los principales huéspedes que se alojan en este peculiar Hotel para pasar sus días de vacaciones. Unos días de relajamiento totalmente alejados de los humanos y de su curiosa y odiosa vista.
*Conde Drácula.- Es el dueño del hotel y se caracteriza por ser todo un padrazo que siempre está pendiente de su hija, Mavis. A pesar de que Mavis se ha hecho mayor, Drácula sigue teniendo hacia ella una actitud demasiado protectora por un triste incidente del pasado. (Voz de Adam Sandler).
*Mavis.- La hija de Drácula. Está a punto de cumplir la mayoría de edad (118 años) y ansía conocer mundo, ya que nunca ha abandonado las paredes del Hotel de su padre. (Voz de Selena Gomez. De hecho, fue su primer papel protagonista en una película de animación: “Tenía muchas ganas de hacer una película familiar divertida. Estoy encantada de formar parte de este proyecto”).
*Jonathan.- Un joven y divertido mochilero humano que se cuela en el Hotel sin saber que allí los humanos son odiados. Un odio suscitado merced a la propaganda que impulsa Drácula. (Voz de Andy Samberg).
*Señor y Señora Frankenstein.- Los Frankenstein pasan por ser los mejores amigos de la familia Drácula. Frankenstein es el mejor amigo del famoso Conde y su esposa siempre es atenta con Mavis. (Voces de Kevin James y Fran Drescher).
*Wayne, El Hombre Lobo.- Tenemos aquí un Hombre Lobo de origen andaluz, casado con Wanda (una Mujer Loba) y con cientos de hijos que lo han terminado agotando. Es una sombra de lo que fue por culpa de la tremenda actividad que desarrollan sus hijos pequeños. (Voz de Steve Buscemi).
*Griffin, El Hombre Invisible.- Representado por unas gafas, es el fiel “reflejo” de cierto director y actor de cine bajito y con gafas…(Voz de David Spade).
*Murray, La Momia.- Otro de los grandes amigos de Drácula que destaca por su voluminoso cuerpo de siglos de vida sedentaria. (Voz de CeeLo Green).
*Quasimodo.- Directamente desde Francia viene este cocinero bajito, sin afeitar y de mal carácter. Además viene acompañado de su mascota favorita: Esmeralda, una rata que es su principal esbirra. (Voz de Jon Lovitz).
“Qué desperdicio de inmortalidad” (Jonathan)
En conclusión.
Termino esta crítica de Hotel Transilvania con la definición que Santiago Segura y Alaska hicieron en la rueda de prensa de presentación en la Sala Sony de Madrid y que me resulta que ni pintada: “Es un film familiar que no insulta a la inteligencia del espectador adulto. Además, también tiene su parte para que sea disfrutada por un público adolescente en la relación establecida entre Mavis y Jonathan. La película deja claro que no se debe prejuzgar a nadie por su aspecto exterior”. Más de acuerdo con ellos imposible.
Tráiler de Hotel Transilvania
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