Liga de la Justicia: Número 20
Comparte con tus amigos










Enviar

Comentario de Liga de la Justicia: Número 20.

Con esta grapa finalizan las aventuras de Shazam en esta cabecera. El cómic que fuera un complemento de dicha serie (con un número 13 exclusivo suyo) ahora termina con otro número exclusivo. Pero termina por todo lo alto ya que Black Adam hará todo lo que tenga que hacer para ser el único campeón del Mago. Todo ello en Liga de la Justicia: Número 20.

Valoración.
El que se incluyera ¡Shazam! como complemento a la grapa de “La Liga de la Justicia” fue todo un acierto. ¿A quién le amarga un dulce? Antes de conformarnos con páginas de relleno a base de bocetos, portadas alternativas y/o editoriales mejor aprovecharlas con un cómic adicional. Un cómic que, durante los altibajos de la serie regular de la Liga en los últimos números, se convirtió en el mejor aliciente para los lectores.

Igual que pasara con el número 13 de la colección, en esta grapa también se utilizan todas sus páginas para contar una historia abarcadora. De esta manera, Geoff Johns no se ve limitado a la hora de expresarse y con la ayuda de Gary Frank nos ofrecen todo un espectáculo. El tiempo de las palabras ha dado paso a la acción.

Uno de los mejores regalos que encontramos es la bestia en la que los “Pecados Capitales” transforman al alma más podrida de la ciudad. Se trata de un espectacular demonio (como se puede apreciar en el dibujo que acompaña este artículo). Y, aunque no se mencione por nombre, se trata de Sabbac; un enemigo de Shazam. Al igual que cada letra que conforma el nombre de nuestro héroe proviene de un personaje (la sabiduría de Solomon, la fuerza de Hércules, la resistencia de Atlas, el poder de Zeus, el valor de Aquiles y la velocidad de Mercurio) lo mismo sucede con este enemigo. El poder (y nombre) de Sabbac proviene de: Satanás, Aim, Belial, Belcebú, Asmodeus y Crateis; siniestro y genial. Espero que no sea la última vez que veamos este personaje por las páginas de DC.

Otros personajes relacionados con el universo de Shazam hacen acto de presencia también. Habrá a quienes les pasen desapercibidos pero quienes los conocemos sabemos su razón de ser. Y también sabemos/esperamos que vuelvan a aparecer eventualmente. Me encantaría poder hablar de ellos pero no quisiera arruinarle o destriparle la historia a nadie por lo que lo dejaré hasta aquí.

En cuanto al cómic en sí de ¡Shazam! hay que quitarse el sombrero ante Geoff Johns. Ha sabido crear un complemento de calidad que le da la oportunidad al mundo de conocer a este superhéroe tan importante de DC. Lo ha modernizado de una forma tan sutil que está a la par con los tiempos modernos pero a la misma vez respeta la esencia de estos personajes y su universo. Por no mencionar cómo ha sabido llevar un excelente ritmo a la hora de contar la historia. Ha sabido tomarse su tiempo a la hora de ponernos en situación, presentarnos los personajes, desarrollarlos, establecer el conflicto y, en números puntuales como este, dejar que la acción se desencadene.

Por su parte, Gary Frank nos ofrece lo que es su mejor aportación a la serie. No hay un sólo momento en esta grapa que defraude. Las páginas no solamente desbordan acción sino un verdadero espectáculo visual. Los diseños de los personajes son geniales y la batallas impresionantes. Es de tal calidad el dibujo que haces pausas para contemplarlo como es debido.

Conclusión.
Al menos, de momento, las aventuras en solitario de ¡Shazam! han llegado a su fin. Aunque, bien puede tratarse de un comienzo para este personaje. Si tendrá su propia cabecera o no lo cierto es que aquí hemos tenido una gran historia la cual termina con fuegos artificiales.

Escucha nuestro podcast